Muchas noches nos encontramos en pleno descanso y sentimos esos mini pies en nuestra cama acomodándose. Bueno, otra vez ha despertado por la noche tu bebe diciéndote ¡mamá no puedo dormir solito! y tu solo piensas en ¿Estoy si haciendo bien en acostarlo en nuestra cama?, ¿Sera normal?, ¿Que magia puedo hacer?
Para algunas familias es normal, para otras no, solo debes confiar en tu instinto y ver si este efecto nocturno esta afectando directamente al descanso familiar. Sin embargo, no es recomendable que un niño comparta la cama con sus padres. Si es así, debes analizar las situaciones del porque tu hijo esta despertando, considerar las pesadillas, la alimentación, salud, los miedos, la seguridad el ambiente de sueño etc. Existen algunas sugerencias que puedes ir adaptando a tu crianza, tales como:
- Si tu hijo es pequeño, puedes acomodar una cuna o cama pequeña cerca de tu lugar de descanso (en la misma habitación o inicialmente), para estar alerta a este tipo de situaciones en caso de un despertar nocturno (traslado de pieza), explicándole que será momentáneamente por sus pesadillas.
- Flexibiliza, cada cierto tiempo puedes dormir con tu hijo una noche como premio al lograr pasar mas tiempo de descanso nocturno en su habitación.
- Antes de dormir, procurar revisar el ambiente de sueño de tu hijo (temperatura, cama, ruidos, ventanas, luces etc.).
- Si vas a hacerlo dormir en tu cama y luego traspasarlo, créeme que es un error puesto que producirás confusión a la hora cuando el despierte e ira constantemente a tu pieza, por lo cual te sugiero familiarizar las siestas en su pieza inicialmente y luego la hora de sueño nocturno.
- En caso de SOS, una lámpara espanta cuco y un objeto de apego con tu aroma puede ser un buen remedio.
- Ser perseverante y cada vez que ocurra el traspaso de cama a media noche, con mucho amor invítalo a su habitación, muéstrale lo afortunado y cómodo que es estar ahí, acompáñalo hasta que se duerma.
La autonomía se puede fomentar desde pequeños, solo debes ser constante y tener mucha paciencia, amor, recordando siempre flexibilizar y entregar la mayor de las seguridades a tu hijo.
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